jueves, 23 de junio de 2011

MADRID - DOHA - BANGKOK

Buenassss...

veamos, intentaremos resumir lo acontecido hasta ahora, ya que el cansancio de las 35 horas sin dormir está haciendo su efecto...


Lo primero: FELICES de estar aquí. =) El vuelo bien... 15 horas en total con escala en Doha, pero bien. El trayecto aeropuerto - Bangkok ya es otra cosa... El taxista, pobre hombre, debía estar aún mas cansado que nosotras y se dormía en TODOS los semáforos y se despertaba cuando los coches de atrás pitaban para que se moviera. En fin, menos mal que nos hemos dado cuenta cuando ya llevabamos una gran parte del viaje recorrido. Y aquí estamos, sanas y salvas!


La comida también bien... hemos optado por clásicos como pad thai y ensalada de mango... los saltamontes, larvas y escorpiones churruscaditos que hemos visto en los puestos callejeros los dejamos para mas adelante... No vamos a quemar todos los cartuchos el primer día!




Eso si, el masaje tailandés ha caido. Nos lo merecíamos... aunque después de la hora que ha durado... no nos lo merecíamos!!! Menuda paliza! Mas que masaje parecía pressing catch. Codos, rodillas, puños... He empezado a plantearme si la tailandesa en cuestión tendría conocimiento sobre el tema o era la sobrina de la dueña ganándose unas perrillas en el verano. Claro, al principio no dudas de ellas. Como son tailandesa y tienen los ojos atailandesados, pues supones que son unas artistas del mundo del masaje. Claro que luego piensas: si ellas piensan que por ser española, hago la paella y bailo las sevillanas como la mejor de las flamencas o por ser alemana sólo comen chucrut y salchichas... lo llevan claro! (que Kathi es del noooorte!!!) Ahogando los gemidos de dolor flipábamos como dormían nuestro compañeros de masaje de las camillas adyacentes. Según parece el masaje tailandés es así, y estiradas estamos un montón... si, pensamos repetir. Sólo espero que la próxima vez no toque la tailandesa cabreada, porque por mucho que esto sea así, ha utilizado mi cuerpo para vengarse de alguien. Aunque claro, si lo piensas bien, por 4 euros que ha costado, la española que les habla tampoco habría hecho la mejor de las paellas ni la alemana del norte un chucrut de chuparse los dedos. (Por cierto, la española ha aprendido que el chucrut no es una palabra alemana: se dice sauerkraut!). Pues eso.

Mañana (o pasado mas). Hale, un maitai y a la cama! Muackssssssssss

No hay comentarios:

Publicar un comentario